Publicado por congregacion
Preguntas del tema:
1.-¿Cómo vives tu devoción mariana? ¿Cómo cuidas tu relación con la Madre del Señor en tu vida cotidiana?
2.-«Para asombro de la naturaleza…». Uno de los mayores peligros es «acostumbrarse» al misterio, perder la capacidad de asombro, que es la que nos lleva a dar gracias. Decir que «Dios se hizo hombre» es algo ‘escandaloso’, pues «hay más distancia del Cielo al suelo… que del suelo a la Cruz». Es el misterio que María llevó en sus entrañas, que acunó en sus brazos, y que cada día se nos entrega en la Eucaristía. Ya que el misterio toca también tu carne, ¿el asombro forma parte de tu oración? ¿te admiras de los misterios de Dios, al modo cómo se admiró María?
3.-Una consagración total como la de Juan Pablo II solo puede realizarse de corazón desde la confianza, desde la seguridad serena de que María protege y cuida tu Ese fue el encargo que le dio Jesús en la cruz: cuidarte. ¿Te dejas? ¿Sientes a la Virgen como Madre, pones tu vida en sus manos? ¿Cómo podrías crecer en tu confianza filial?